La incertidumbre es falta de certeza y la necesidad de tener confianza y seguridad sobre el futuro.
La incertidumbre puede paralizarte… ¡mejor toma decisiones!
Es esa necesidad que invita a la anticipación de obtener una respuesta inmediata a aquello que es ambiguo, que causa confusión y que pretende tener control sobre lo que ocurre en la vida. Provoca inquietud y nerviosismo por no saber como actuar o abordar lo que sucede.
Cuando la incertidumbre se convierte en un motivo de preocupación excesiva por el futuro; tiende a aumentar el nivel de estrés, provoca ansiedad, insomnio, aleja del gozo, de la motivación, del entorno y de tu conexión nutricia en las relaciones. Se deja de poner atención a lo realmente importante, que es lo que verdaderamente está ocurriendo en el momento, presente.
Ante la incertidumbre desproporcionada pueden surgir sentimientos de la familia del miedo como: la inseguridad, la fragilidad, la desconfianza, el pánico; todos ellos son sentimientos que nos llevan al deterioro y no al crecimiento. Lo recomendable es mantenerse en el aquí y ahora, concentrando la energía en lo que sí es posible hacer.
Transitar con equilibrio la turbulencia de la incertidumbre prepara y moviliza; previniendo posibles sucesos; y en el caso de ocurrir, anticipa las herramientas y las decisiones para afrontarlos.
La incertidumbre también puede ser una aliada cuando se experimentan sensaciones y sentimientos desconocidos ya que te movilizan a encararla y utilizar tu ingenio. En esta incertidumbre de coexistir con ella, eliges y tomas decisiones que las más de las veces las pensarás en consciencia, y que promoverán cambios a favor de tu crecimiento y satisfacción.
Cómo afrontar la incertidumbre
- Acepta lo que está sucediendo, para encontrar tus recursos para afrontarla.
- Fomenta tu adaptación practicando la flexibilidad.
- Quédate en el momento presente y detén tus pensamientos anticipatorios.
- Reflexiona que la mejor forma de transitarla es tomando decisiones, así que… ¡Actúa!
Ante estas posibilidades de cómo afrontar la incertidumbre, un proceso de coaching ejecutivo se vuelve efectivo para sacarle provecho a tu creatividad en la novedad; porque en la novedad hay crecimiento y es así, como descubres tus capacidades para renovarte, emprender caminos, materializar sueños y cumplir metas.